jueves, 22 de octubre de 2015

Soliloquio de un cadáver - Velatorio uno


Tumbado, relajado, inmóvil, observo
el trascurrir de la vorágine. Dentro de mi urna de cristal, de mi prisma cuadrangular,  de mi cueva artificial,  maquillado, vestido para la ocasión.  Acomodado en mi lecho acolchado. Blanco. Impoluto. Suave. Apuntillado. Con mis manos cruzadas en mi torso. Con traje y corbata. Sin consciencia. Sin pensamiento. Sin síndromes . Sin trastornos. Sin angustias ni ansiedades. Sin pesadillas. Sin pastillas. Sin antídoto contra el deceso. Muerto y bien muerto. Inconsciente. Una persona me mira y comenta. Parece dormido. Como si soñase. Ni siente ni padece. Lo que es la vida.

Ulises

Soliloquio de un cadáver - Deceso uno

Sentado delante del ordenador ancestral. Escuchando la banda sonora de Blade Runner. Navegando por páginas web diversas, sesgadas, profundas, superficiales, surrealistas, realistas. Mi nivel de ansiedad disminuye notablemente. Súbitamente comienzo a sentir un dolor extraño, irreconocible, profundo. Se agudiza sin explicación, inexorablemente. Una parte de mi cuerpo se paraliza progresivamente. Mis estatocistos dejan de ejercer su función. Me desequilibro. La gravedad causa mi caida. El golpe contra el suelo retumba. Mi percepción disminuye. Veo el túnel que me lleva a la inconsciencia. Todo se apaga. No siento. He dejado de padecer.

Ulises

miércoles, 16 de septiembre de 2015

Paranoia

Después de embarcarnos en una nave sin rumbo definido. En un viaje a ninguna parte. En busca del Dorado. Moviéndonos a través de la cuarta dimensión. En una dirección difusa, sin destino conocido. Y visitando sitios, lugares variopintos, conceptos de diversa índole, ninguno adaptado a nuestras necesidades sociales, físicas y mentales. Desplazándonos sobre una estructura bidimensional, en una cinta de Moebius sin principio ni final. En bucles continuos y repetitivos. Hemos conseguido pararnos, reflexionar, analizar la situación y como Ulises en su periplo por las islas jónicas y aguas delirantes en  su Odisea, volver al inicio, a Itaca. En nuestro caso recalar nuevamente en el Gururú. Reconstruir mis conexiones neuronales. Abrir un vórtice de energía y conectar con mis otros yos. Llegar a la iluminación. Acabar con la ansiedad, con mis angustias, mis indecisiones, mis confusiones y como decía Confucio llegar a ser un ser libre de prejuicios, calmado, sereno y saber gobernarse a sí mismo. Es una misión imposible. Aunque para Tom Cruise no hay nada imposible.

SC

domingo, 1 de febrero de 2015

Huelga

Hoy es el enésimo día de huelga de los profesores del Instituto. Hemos decidido entre
todos los alumnos seguir con las clases. Esta mañana me he subido a la tarima para
impartir la asignatura de matemáticas. En este curso se me están dando bien y entre todos
han decidido que yo explique los límites y derivadas. La clase de biología la imparte mi
compañero de pupitre y amigo Fernando Sánchez. Entre todos estamos siendo capaces
de avanzar en todas las asignaturas. Cada día preparamos el temario del día siguiente. Es
divertido e insólito, a la vez que gratificante. Mañana el delegado se subirá a la tarima para
explicar la situación y tomar decisiones. De momento Carlos comienza a explicar la
dinámica de fluidos.

SC

Meliana

Esta tarde vamos a ir a las huertas. Vamos a coger caracoles a las alcachofas. Mi madre
los cocina en una gran olla, estan muy buenos, sobre todo la salsa. Es nuestro plato
favorito cuando veraneamos en Valencia. Alquilamos un piso en Meliana, un pueblecito
cerca de la playa. Este año hemos ido en el ochocientos cincuenta del señor Paco,
profesor de música, vecino en Madrid y artesano. Es capaz de fabricar las mejores
guitarras de España. Ellos tienen un piso precioso en las afueras, donde pasan casi todo el
verano. Tienen familia en el pueblo, hermanos, sobrinos, tios....Me encanta ir a visitarlos, ir
a por el pan, hablar valenciano y comernos una paella inmensa entre todos. Lo que mas
me gusta es ir por las tardes a escuchar, en silencio, tocar la guitarra al señor Paco
cuando estudia. Me quedo embelesado, pierdo la noción del tiempo y del espacio. Sor,
Tárrega, Albeniz, Bach, Carcassi....Por la mañana cogemos el autobús que va a la playa.
A veces jugamos a ser náufragos. Nos comemos el bocadillo a media mañana y después
hacemos una hora de digestión. He encontrado un libro en una mesilla. Solitario. Su título
es Sinuhé el egipcio. Hoy he comenzado a leerlo. Todos los días me sumerjo en su
cautivadora historia. No me gusta volver a Madrid.

SC

sábado, 20 de diciembre de 2014

El Castillo

Es noche cerrada hace tres horas. Descendemos por la suntuosa escalera de piedra
alfombrada. La lluvia cae vehementemente. Menos mal que tenemos un paraguas en el
coche. Salimos del castillo y traspasamos el patio pedregoso. Bajamos agarrados del
brazo por la calle empedrada que nos lleva a la catedral. Regueros efímeros canalizados
entre grietas nos acompañan. El viento nos obliga a inclinar más el paraguas. La
iluminación de la calle es deficiente. Giramos y entramos en el bar. Dos cañas, por favor.
El ambiente es agradable. Dos orientales sentadas en la barra disfrutan de sus tapas. Nos
sentamos pegados al ventanal. Las gotas de lluvia borbotean en la acera, en este
momento entran dos parejas sexagenarias. Son franceses. El camarero se esmera por
comprenderles. Comemos, bebemos, disfrutamos. Vivimos.
SC

Concierto

Pulso la aplicación de YouTube en mi movil. Busco con cierta impaciencia a Bach. El
número de conciertos es extenso. Con mi dedo pulgar seleciono el Magnificat en do
mayor. Conecto mi televisor y mágicamente la música suena con grandiosidad y pureza. El
director gesticula, siente, dirige, baila. La voz humana resuena junto a las flautas de pico.
El contrabajo se insinua al fondo. Raquel tumbada en el sillón me mira y se relaja. Yo
escribo este microcuento y disfruto de la música barroca de Juan Sebastian Bach. El coro,
timbales, cuerdas, metales y vientos conforman un conjunto armónico insuperable.
Magnífico. El espacio y el tiempo se difuminan en mi mente. La nada y el todo se funden
en una amalgama indescriptible. Aplausos.
SC